A mi peque no le gusta nada, ¿qué puedo hacer?
Ya sabes que además de dietista soy maestra, y uno de mis intereses principales respecto a la alimentación es la importancia de inculcar unos hábitos saludables desde la infancia para cuidar nuestra salud. Por eso no es la primera (ni la última) vez que hablo sobre alimentación infantil… aquí, aquí y aquí tienes artículos específicos sobre ello. Y siguiendo este enlace tiene todo lo que he escrito sobre alimentación infantil en los últimos años.
Una vez que ya te he recordado todo esto, vamos a entrar en materia. No hay manera de que tu peque pruebe cosas nuevas, no le gusta nada…
¿Seguro que no le gusta nada?
Muchas veces, ofrecemos un nuevo alimento a nuestros hijos y lo rechazan, entonces ya pensamos que no les gusta y no volvemos a ofrecerlo.
Que los peques rechacen alimentos nuevos es totalmente normal y no debe hacernos desistir.
Esto se llama NEOFOBIA y es una especie de instinto de supervivencia. Rechazan cosas nuevas, sobre todo si no nos ven comerlas a nosotros o si tienen sabores amargos.
La neofobia es algo totalmente normal y no define los gustos de nuestros peques.
Tampoco se trata de obligar forzosamente a comer.
Lo ideal es tener paciencia y ser ejemplo, exponer poquito a poco a nuevos alimentos; que los vea, los toque, juegue, nos vea comerlos a nosotros… que su interés vaya despertando y desaparezca su rechazo.
¿Alguna vez has comido con un bebé en brazos?
Le llama la atención todo lo que te lleves a la boca y quiere cogerlo y probarlo.
Esos son los mejores momentos para ir introduciendo nuevos alimentos (siempre a partir de los 6 meses.
Si desde el principio de la alimentación complementaria les ofrecemos repetidamente diferentes alimentos, poco a poco irán aceptándolos y comiendo variado y saludable.
No desistas y no te dejes embaucar por prejuicios.
Lógicamente todos tenemos unos alimentos que nos gustan más y otros menos, pero eso no tiene nada que ver con nuestra edad.
Porque a los peques también les gustan las verduras.
Neofobia, ¿cosa de niños?
Pero, aunque hablamos de neofobia como algo propio de los niños, los adultos también lo sufrimos.
Todos conocemos alguna persona a la que «no le gusta nada» y, generalmente, eso es algo que viene de la infancia.
Debemos respetar los gustos de nuestros peques, pero animar a probar y exponerles de forma gradual a todo tipo de alimentos.
No existe la comida para niños.
Existe la comida saludable que todos debemos comer.
Si nunca dejamos que los peques prueben cosas nuevas porque «no le va a gustar».
Si no le ofrecemos un alimento cocinado y presentado de diferentes formas.
Si no nos ve comer sano y variado.
…
Nunca va a llegar a saber si un alimento le gusta o no, simplemente sentirá rechazo de entrada sin darse la oportunidad de descubrir el sabor, la textura, diferentes combinaciones.
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