Si hace apenas un año la Aesan nos alertaba sobre el consumo de pescado azul, ahora publica recomendaciones sobre las hortalizas de hoja. Veamos en detalle qué significan estas recomendaciones de consumo de hortalizas de hoja en niños.
Los nitratos son unos compuestos químicos que están presentes en algunos alimentos de manera natural y que, por sí mismos, tienen una baja toxicidad.
El cuerpo humano transforma estos nitratos en nitritos, que a altas concentraciones pueden llegar a ser tóxicos. Por eso los bebés y niños pequeños son más vulnerables.
¿Qué provoca una intoxicación por nitritos?
La intoxicación por ALTAS concentraciones de nitritos provoca metahemoglobinemia que es una enfermedad en la que la hemoglobina normal de nuestra sangre cambia a una forma en la que no transporta el oxígeno.
Esto puede provocar desde un color azulado en la piel hasta, en casos graves, la muerte por falta de oxígeno en órganos y tejidos.
Pero controlar la cantidad de un alimento no significa eliminarlo
Así leído puede asustar y parecer muy grave, pero si valoramos riesgos y beneficios del consumo de hortalizas, los beneficios siempre ganan.
Simplemente debemos controlar en nuestros peques la cantidad que consumen de alimentos ricos en nitratos y asegurarnos de que su dieta es variada y equilibrada.
Recomendaciones
Las hortalizas más ricas en nitratos son las acelgas, lechuga, col, remolacha, borraja y espinacas (sobre todo crudas, más que congeladas).
Como he comentado antes, el problema viene a altas concentraciones, por lo que la cantidad recomendada para peques va a depender de la edad que tengan.
La BORRAJA no se recomienda en ningún caso antes de los 3 años de edad.

Sobre las otras hortalizas; ACELGA, ESPINACA, COL y REMOLACHA la recomendación es diferente. Podemos dárselas a nuestros peques a partir de los 6 meses, cuando inicien la alimentación complementaria teniendo siempre en cuenta lo siguiente:
De 6 a 12 meses no debemos superar la cantidad de 35 gramos al día y siempre como parte de purés o como guarnición. Y mejor si empezamos a incorporarlas a partir del año.

Entre 1 y 3 años podemos aumentar un poquito esta cantidad hasta llegar como máximo a los 45 gramos al día.

Y si el niño/a tiene una infección bacteriana gastrointestinal o vómitos, diarrea, dolor abdominal que nos hagan sospecharlo, no debemos ofrecerle estas hortalizas en ninguna cantidad.
Verdura ya cocinada
Otro aspecto a tener en cuenta es la conservación de la verdura ya cocinada, ya que si no la conservamos de manera adecuada los nitratos se pueden transformar en nitritos de forma natural.
Por esto, lo que debemos hacer es desechar SIEMPRE el agua del lavado y cocción de las hortalizas ricas en nitratos.
Otro aspecto a tener presente es que si cocinamos las verduras para consumirlas otro día debemos congelarlas.
Y, en el caso de que vayamos a consumirlas el mismo día en que las cocinamos, deberemos mantenerlas en el frigorífico.

Tienes toda la explicación en este vídeo de mi canal de YouTube: